La vida universitaria puede ser un torbellino de nuevas experiencias, desde desafíos académicos hasta actividades sociales. En medio de todo esto, administrar tus finanzas es una habilidad crucial que debes dominar.
A continuación, se ofrecen algunos consejos básicos para la elaboración de presupuestos que ayudarán a los estudiantes universitarios a sortear las complejidades de los costos de matrícula, los costos de alojamiento y los gastos diarios. Aprende a crear un presupuesto realista, a ahorrar dinero y a aprovechar al máximo tus recursos financieros mientras te concentras en tu educación.
1. Crea un presupuesto realista
Elaborar un presupuesto es la piedra angular de la administración financiera. A continuación, se incluye una guía paso a paso para elaborar un presupuesto realista:
Enumera tus ingresos
Incluye las becas o subvenciones que hayas recibido. Calcula los ingresos mensuales de cualquier trabajo a tiempo parcial. Si tus padres te brindan ayuda financiera, incluye esa cantidad. Si tienes préstamos estudiantiles, incluye solo la cantidad que planeas utilizar cada mes.
Realiza un seguimiento de tus gastos
Enumera los costos fijos, que son gastos regulares y recurrentes que suelen ser los mismos cada mes, como:
- Entretenimiento: películas, conciertos, salir a comer.
- Alimentos: alimentos y artículos para el hogar.
- Aseguranzas: aseguranza médica, de automóvil o de inquilinos.
- Gastos personales: ropa, artículos de aseo, etc.
- Alquiler: alquiler mensual de la vivienda.
- Transporte: costos de gasolina, transporte público o viajes compartidos.
- Matrícula y cuotas: el costo de las clases y las cuotas universitarias.
- Servicios públicos: electricidad, agua, internet y otros servicios públicos.
- Costos variables: son los gastos que pueden fluctuar cada mes, como:
Establecer límites de gasto
Determina cuánto dinero asignar a cada categoría en función de tus ingresos. Utiliza aplicaciones de presupuesto como Mint, YNAB (You Need A Budget, en inglés) o incluso una simple hoja de cálculo para ayudarte a llevar un registro de tus gastos y hacer los ajustes necesarios. Prepárate para reasignar fondos si descubres que has subestimado un gasto o que tienes un exceso en una categoría.
2. Prioriza tus gastos
Priorizar tus gastos consiste en distinguir entre necesidades y deseos, asegurándote de que tus gastos esenciales estén cubiertos antes que los gastos discrecionales. A continuación, te indicamos cómo hacerlo:
Identifica necesidades vs deseos
Las necesidades son elementos esenciales de los que no puedes prescindir, como por ejemplo:
- Alimentos: alimentos y artículos básicos para el hogar.
- Alquiler y servicios públicos: para tener un techo y pagar los servicios públicos.
- Libros de texto y materiales de estudio: necesarios para los cursos.
- Transporte: para ir y volver de la escuela o el trabajo.
Los deseos son artículos no esenciales que es bueno tener pero no son necesarios:
- Entretenimiento: películas, conciertos, salir a cenar.
- Moda: ropa o accesorios nuevos.
- Nuevos gadgets: el último teléfono o los últimos accesorios tecnológicos.
Enfócate primero en las necesidades
Asegúrate de tener un presupuesto suficiente para todas tus necesidades primero. Esto te asegurará que puedas mantener tu nivel de vida básico. Una vez que tengas cubiertas tus necesidades, puedes presupuestar tus deseos. Si los fondos son limitados, prioriza los deseos que te brinden más alegría o beneficio.
Toma decisiones inteligentes
Antes de realizar una compra, pregúntate si se trata de una necesidad o un deseo. Esto puede ayudar a frenar las compras impulsivas. Considera alternativas más económicas u opciones gratuitas para entretenerte y socializar.
3. Ahorra dinero siempre que sea posible
Ahorrar dinero como estudiante puede parecer un desafío, pero hay muchas estrategias que puedes usar para estirar aún más tu presupuesto:
Utiliza los descuentos para estudiantes
Muchos minoristas ofrecen descuentos a los estudiantes. Siempre pregunta si hay descuentos para estudiantes disponibles. Servicios como Spotify, Apple Music y Adobe ofrecen precios para estudiantes. Consulta si tu escuela ofrece software gratuito o con descuento. Los estudiantes suelen tener descuentos en transporte público, entradas de cine y más.
Comprar libros de texto usados:
Busca libros de texto usados en línea o en las librerías del campus. Las versiones digitales también pueden ser más económicas. Algunos servicios te permiten alquilar libros de texto por un semestre. Utiliza la biblioteca de tu universidad para obtener las lecturas y los materiales obligatorios.
Cocina en casa
Planifica tus comidas para la semana y crea una lista de compras para evitar comprar artículos innecesarios. Prepara comidas en grandes cantidades y guarda las sobras para usarlas más adelante. Esto puede ahorrar tiempo y dinero. Intenta limitar las comidas fuera de casa a ocasiones especiales. Las comidas caseras son más saludables y económicas.
4. Crea un fondo de emergencia
Un fondo de emergencia es una parte fundamental de la estabilidad financiera, ya que proporciona una red de seguridad para gastos inesperados. A continuación, te indicamos cómo establecer uno:
Comenzar pequeño
Establece metas alcanzables, cómo ahorrar una cantidad pequeña y manejable, como entre 20 y 30 dólares al mes. Aumenta gradualmente tus ahorros a medida que te sientas más cómodo con la elaboración de un presupuesto. Incluso las pequeñas contribuciones se acumulan con el tiempo.
Cuenta separada
Abre una cuenta de ahorros separada específicamente para tu fondo de emergencia. Esto ayuda a evitar gastos accidentales. Si es posible, elige una cuenta de ahorros de alto rendimiento para ganar más intereses sobre tus ahorros.
Automatizar los ahorros
Configura transferencias automáticas desde tu cuenta de cheques a tu fondo de emergencia. Esto garantiza ahorros constantes sin requerir esfuerzo adicional. Utiliza aplicaciones que redondean tus compras al dólar más cercano y ahorra la diferencia. Esto puede generar tu fondo de emergencia de forma pasiva.
Úsalo sabiamente
Utiliza tu fondo de emergencia únicamente para gastos esenciales e inesperados, como facturas médicas, reparaciones del automóvil o viajes urgentes. Después de utilizar tu fondo de emergencia, prioriza la reposición del mismo para mantener tu red de seguridad financiera.
5. Administrar el crédito de forma inteligente
El crédito puede ser una herramienta financiera valiosa si se utiliza de manera responsable. A continuación, te ofrecemos algunos consejos para administrar el crédito de manera eficaz:
Úsalo con moderación
Limita el uso de la tarjeta de crédito a las compras esenciales que sepas que puedes pagar en su totalidad cada mes. Evita usar el crédito para artículos no esenciales o compras impulsivas. Controla de cerca el uso de su tarjeta de crédito para asegurarte de no excederse de tu presupuesto.
Evitar la deuda
Intenta siempre pagar la totalidad del saldo de tu tarjeta de crédito cada mes para evitar cargos por intereses. Esto te ayudará a construir un historial de crédito positivo sin acumular deudas. Si no puedes pagar el saldo total, al menos haz el pago mínimo para evitar cargos por pagos atrasados y marcas negativas en tu informe crediticio.
Monitorea tu crédito
Revisa periódicamente tu informe de crédito para detectar errores o actividades fraudulentas. Puedes acceder a tu informe crediticio de forma gratuita una vez al año en cada una de las tres principales agencias de crédito. También lleva un registro de tu puntuación de crédito. Muchos bancos y compañías de tarjetas de crédito ofrecen un control gratuito de tu puntuación de crédito.
Úsalo responsablemente
Ten en cuenta tu límite de crédito y trata de utilizar menos del 30% de este. Un uso excesivo puede afectar negativamente tu calificación de crédito. Configura recordatorios o pagos automáticos para asegurarte de no perder nunca una fecha de vencimiento.
Administra tu dinero de manera inteligente con AZCCU
Si pones en práctica estos consejos presupuestarios, podrás administrar mejor tus finanzas, reducir el estrés y concentrarte más en tus estudios y en la experiencia universitaria en general. Recuerda que dominar tus finanzas es un proceso continuo que requiere diligencia y adaptabilidad. Con un presupuesto bien planificado, podrás aprovechar al máximo tus recursos financieros y disfrutar de tu tiempo en la universidad sin preocupaciones financieras constantes.
Arizona Central Credit Union puede ayudarte en tu camino hacia la universidad con préstamos estudiantiles, cuentas de ahorro y más. Si tienes alguna pregunta, contáctanos en línea o llame al (866) 264-6421.